La transformación digital no es instalar wifi en un negocio, se trata de incorporar la tecnología a una manera de funcionar de la empresa, encontrar en ella una ventaja competitiva y ponerla al servicio del cliente. Los hábitos de consumo del público están cambiando entorno a las nuevas tecnologías; ya no se compran discos sino que se escucha música en streaming, se consultan las noticias de última hora a través de las redes sociales en vez de leer el periódico o se paga directamente desde el teléfono móvil… Es decir, cada vez hay más posibilidades tecnológicas pensadas para facilitar la vida de los clientes. Toda empresa debe ir por delante a las necesidades de su público si quiere lograr destacar frente a la competencia o posicionarse como una organización pionera en su sector.
Gracias al avance tecnológico de las cosas, es más fácil recabar información estadística en base al comportamiento del target, existen diversas herramientas al alcance de todos para conseguir la información y desgranarla para destacar aquellos detalles que serán de gran interés para definir tu estrategia.
Como responsable de una empresa, puedes decidir dar el paso hacia la transformación digital por dos motivos:
– Estar sometido a la presión del cliente.
– Por los avances de la competencia.
Existen ejemplos reales que demuestran la importancia que conlleva planificar el salto a la transformación digital a nivel empresarial y diseñar una estrategia ordenada para evitar situaciones de pánico y caos en tu organización.
Podemos hablar del sector de la prensa o la música y ¿por qué parece estar siempre en crisis la prensa? ¿Se le ha adelantado internet y no ha sabido responder a tiempo y adaptarse? A día de hoy, el cambio a la transformación digital de estos sectores no ha sido con éxito, son dos sectores desestructurados que navegan sin un rumbo claro buscando nuevas salidas y oportunidades.
También es cierto que la digitalización no afecta a todos los sectores por igual, aunque cada sector y organización es única y distinta, es por ello que el cambio a la transformación digital empresarial requiere estudiar las posibilidades y necesidades concretas mediante profesionales o agencias dedicadas a este campo.
Un ejemplo de buena praxis es el del sector bancario quien ha entendido el cambio de hábitos de su target en lo referente a la tecnología y lo está adaptando a su modo de acción, por ejemplo, suprimiendo gradualmente las sucursales físicas y llevando los trámites a las oficinas virtuales. ¿Qué ha hecho bien la banca que no ha hecho la prensa? Ha sabido tener visión, ha contado con el asesoramiento adecuado y ha puesto en marcha la transformación digital en todas las áreas de su empresa.
¿Cómo afecta a la empresa?
Como se ha indicado, la transformación digital no es cuestión de instalar nuevos equipos o cambiar los existentes por nuevos, la transformación digital afecta a todas las áreas de una empresa, desde su forma de trabajar y de tomar decisiones, hasta su relación con clientes y proveedores. Se trata de la creación de nuevos procesos de trabajo y nuevas rutinas que ayuden a optimizar el funcionamiento habitual de una organización, beneficiándose de las ventajas y facilidades que brinda la tecnología.
- Los procesos operativos
Continuando con el ejemplo bancario, este sector se ha ido modernizando y ha optimizado sus procesos con el paso de los años. Primero llegó la revolución de los cajeros automáticos, después los ordenadores se fueron incorporando a las rutinas de trabajo y hoy día, realizan la mayoría de sus operaciones a través de internet. Cualquier empresa que se desenvuelva en el mundo actual necesita actualizar sus modos de trabajo al comportamiento de la sociedad.
- El contacto con el cliente
Si antes el cliente tenía un problema con su banco no le quedaba otra que llamar por teléfono o acudir a la oficina. Sin embargo, ahora pueden atenderle a través de Twitter o Facebook. Ya no se trata de aprovechar los nuevos canales como vías de comunicación; ahora el cliente quiere bidireccionalidad y atención continua de forma presencial, por email, por teléfono, a través de las redes sociales… Una empresa debe estar preparada para cubrir sus necesidades en estos nuevos canales.
- El diseño de nuevos productos y servicios
Aunque existen muchas formas de atacar a la digitalización empresarial, un buen sistema para empezar el proceso de transformación a la digitalización interna es adquirir un programa de gestión de los clientes o CRM para conseguir una base de datos completa y útil en la toma de decisiones. Otra acción de las más urgentes es la atención al cliente.
Una vez cubiertas las básicas, la empresa puede centrarse en el diseño de nuevos productos y servicios que antes podían parecer sacados de una película futurista. Nadie imaginó que si perdía su tarjeta del banco podría desactivarla desde el teléfono móvil. La marca que ha sabido anticiparse y ha detectado las necesidad en sus clientes ya se encuentra por delante de la competencia.
¿Y si la empresa ha superado estas tres etapas? Entonces tendrá que plantearse un cambio en el modelo de negocio. Y aquí la música es el mejor ejemplo: Si antes el vinilo fue sustituido por el CD, ahora el modelo se ha transformado por completo con la llegada de los servicios de streaming, que gracias al big data y el marketing digital han convertido el escuchar un disco en una experiencia nueva y personalizada.
¿Cómo aplicarla?
Para conseguir todo esto es necesaria la visión desde un punto transversal del proceso y el conocimiento del medio digital. Con estos dos elementos, la empresa podrá anticiparse, aprovechar ventajas y atajar amenazas. Una agencia especializada puede ofrecer todo esto con el asesoramiento adecuado. Como empresario debes plantearte las preguntas precisas que muestren en qué punto de la transformación digital está la empresa y qué puede hacer de aquí en adelante, acto seguido, la asesoría te ayudará a definir la estrategia acorde a tus necesidades.
Ante la duda, estos son algunos de los beneficios que reporta dicha transformación:
- Visibilidad de la marca y de sus actividades. Alguno de los ejemplos expuestos aquí remite claramente a una marca concreta. ¿Por qué? Porque son productos innovadores que se han desarrollado gracias a la visión y conocimiento del medio digital que tiene esa marca.
- Impulsar el negocio online. Ya no basta con tener presencia en internet, hay que trabajar en internet y saber hacerlo explotando al máximo las herramientas que ofrece y supone un impulso para el negocio. ¿Y cómo hacerlo? Para ello es importante plantearse por qué invertir en publicidad digital, cómo hacerlo, con qué herramientas y tener en cuenta los beneficios que nos puede reportar.
- Conocimiento del sector, sus necesidades y características del target.
El modelo de una dirección empresarial basada en la cultura digital demostrará haber alcanzado la cima de la pirámide, una acción posible gracias a la sociedad con una mentalidad novedosa.